A nivel musical, el bootleg es una grabación de audio o video no publicada oficialmente por el artista o su compañía discográfica. Estos bootlegs pueden pueden ser grabaciones de actuaciones en vivo, de grabaciones FM o de consola, de sesiones en estudio, tomas de descarte o de ensayos. La fuente de estas grabaciones suelen ser CD puestos a la venta por compañías dedicadas al comercio de estas (se me vienen a la mente las compañias japonesas Highland, Midnight Dreamer o el extinto “sello discográfico” sueco Stoned), cintas de audio analógico o CD-R obtenidos directamente durante los conciertos por personas que acudieron a ellos con grabadoras domésticas portátiles o cintas del mismo estudio de grabación, que fueron distribuidas sin conocimiento del artista o de la discográfica. Las personas que realizan estas grabaciones piratas reciben el nombre de bootleggers. En la mayoría de los casos, estas grabaciones tienen una calidad sonora o visual (dependiendo del caso) que va de lo aceptable a lo pobre (para los aficionados de estas grabaciones es más importante el valor histórico que la calidad).
Si bien estas grabaciones suelen ser ilegales, algunas bandas como Grateful Dead o Genesis permiten la grabación o distribución de estas mientras no se paguen por ellas (la distribución gratuita o el intercambio es algo común en los circulos de coleccionistas o traders).
Para finalizar agregaré que un bootleg no debe ser confundido con un counterfeit que no es más que una falsificación de una grabación editada oficialmente
Stereofilia 